¿Leña o carbón para la barbacoa?

A la hora de poner en funcionamiento una barbacoa, normalmente se cuenta con dos tipos de material para encender el fuego. En apariencia son similares, aunque tienen características distintas que merece la pena evaluar. Veamos de un modo más detallado la respuesta a una pregunta que seguro que surgirá: ¿Qué es mejor? ¿Leña o carbón para la chimenea?

Lo cierto es que hay quien piensa que se trata del mismo combustible, con la única diferencia de que el carbón es el resultado de quemar un poco la madera, pero hay muchos matices.

Carbón para cocinar varias cosas

Cuando en la parrilla se van a asar distintos alimentos, lo mejor es escoger el carbón por diversas razones. La primera es que el carbón es más práctico cuando se va a prender el fuego, además de que las brasas están listas en menos tiempo. Aproximadamente en media hora todo estará listo para empezar a cocinar carnes y pescados, además de poder envolver patatas en papel de aluminio y hacerlas directamente en el fuego de carbón. Y lo mismo se puede hacer con otros vegetales, aunque algunos prefieren prepararlos como el resto de ingredientes. Unas rodajas de calabacín o unos pimientos asados así son realmente espectaculares.

Usando la parte de arriba y las brasas se pueden cocinar más cosas a la vez, ahorrando tiempo y permitiendo que más gente pueda disfrutar a la vez de lo que va saliendo.

El sabor de la parrilla es sin duda incomparable. Además, si se cuenta con campanas para barbacoas a medida se puede controlar mejor la salida de humos y reducir los residuos.

El carbón es a menudo el combustible mas usado cuando se reúne a unos cuantos amigos para disfrutar de la barbacoa. Sobre todo por la comodidad de prepararlo todo en muy poco tiempo y empezar a disfrutar de los aromas que desprenden los alimentos mientras se cocinan. Lo cierto es que aunque se mezclen un poco los sabores, los matices del carbón convierten todo en un manjar.

El uso de la leña para la barbacoa

Cuando se trata de encender una chimenea para calentarse, usar leña está fuera de toda duda porque se busca tener un fuego que dure mucho tiempo. Pero en la barbacoa lo que importa es la brasa que se va a preparar, que tardará más o menos tiempo en función del tipo de leña que se use.

Además, cabe destacar que no es lo mismo escoger una leña de chimenea que hacerlo para cocinar, sobre todo porque cada madera le da un sabor diferente a los platos. Por eso hay que pensar en qué tipo de elaboraciones se van a hacer para escoger una leña adecuada.

Si se quieren hacer pescados, arroces o platos marineros, la mejor leña es la de encina, que arde bastante bien y se puede controlar mejor el fuego, añadiendo o retirando troncos según haga falta.

El olivo es mejor para asar verdura, aunque es importante tener en cuenta que al ser una madera muy dura, tarda bastante en estar a punto para cocinar. Si vas a preparar una parrilla de verduras y escoges esta leña, empieza a prepararlo todo por la mañana y estará listo cuando llegue la hora de comer al mediodía.

La carne agradece que se use una leña aromática como la de naranjo o pino, que enriquecen mucho las elaboraciones. También es buena idea utilizar sarmientos de vides, si tienes acceso a ellos, porque le aportan un sabor único a los platos. Además tardan relativamente poco comparadas con otras, de modo que si solo piensas asar carne, esta es la mejor opción para hacerlo.

La barbacoa perfecta

Como hemos dicho para preparar una brasa hace falta dedicarle tiempo. Dependiendo del tipo de leña puede llevar más o menos, pero por lo menos se tiene que programar todo una hora antes para tenerlo a punto.

También es importante el tipo de elemento que se utiliza para cocinar. Puedes echar un vistazo a nuestra tienda online de barbacoas y encontrarás modelos de todos los tipos, tanto para instalar fijos como con ruedas para llevar de un lado a otro con comodidad. Tú eliges cómo disfrutar de todo.

Además de las brasas es posible que también tengas que preparar los ingredientes. Piensa en qué es lo que quieres cocinar, ya que puede que necesites adobar carnes, limpiar pescados o preparar la verdura para ponerla sobre la parrilla. Puedes ir haciéndolo también mientras se prepara la brasa y no tendrás que avivar el fuego porque se ha apagado.

Lo mejor es que los ingredientes estén a temperatura ambiente para que se cocinen de manera uniforme. Así que sácalo todo de la nevera con tiempo para que pierda el frío y se quede al punto deseado.

Si se va a cocinar en una zona poco ventilada

Lo mejor es tener la barbacoa en una zona que tenga buena ventilación, normalmente al aire libre (ya hablamos acerca de cómo hacer una barbacoa de obra). Aunque puede que las circunstancias no sean las más adecuadas y aún así no quieras prescindir de una buena parrillada. En este caso es mejor usar carbón porque hay ciertos elementos que produce la leña al quemarse que exigen que se queme en una zona bien ventilada. También puedes elegir una barbacoa que tenga un sistema de extracción forzada, aunque no siempre será posible.

Sea como sea, lo cierto es que una barbacoa siempre es agradable. Escoge entre leña o carbón y prepárate para disfrutar de un bocado exquisito.